En este mes de agosto desde la “Prioridad Apostólica de la Educación” ha querido llegar a la Familia del Sagrado Corazón con una motivación para seguir acercándonos al documento de la Congregación: “LA FILOSOFIA DE LA EDUCACION DEL SAGRADO CORAZON. Regalo de Sofía… Nuestra llamada al futuro”.
Desde la reflexión que se va haciendo en Barranquilla, Leonor Calle comparte cómo ha vivido la educación, desde su experiencia de educadora del Sagrado Corazón:
“Inicio diciendo que yo no tenía vocación de educadora, la fui aprendiendo, gracias a la Madre Toro que nos inició en esta práctica.
Fui tomando conciencia de adquirir actitudes y sentimientos del Corazón de Jesús para poder trasmitir el legado de Santa Magdalena Sofía.
Estar unidas al Corazón de Jesús y trasmitir el conocerlo y amarlo.
Al ir descubriendo los valores del Corazón de Jesús y al ir creciendo en la fe, pude ir trasmitiendo el paso del Señor a través de las materias en las clases.
La paciencia, el respeto, la escucha a las estudiantes, la responsabilidad para preparar bien las clases y la apertura al Espíritu, permitieron ver el paso de Dios a través de las personas, acontecimientos y las cosas del mismo trabajo.
En la vocación como Educadoras del Sagrado Corazón damos, trasmitimos, pero al mismo tiempo, recibimos bondad, conocimientos, ternura, valores. El aceptar este proceso de dar y recibir, me ayuda a descubrir dones, capacidades para la entrega a los demás.
Desde mi experiencia puedo decir que es muy importante tener cuidado con el proceso, más que con los resultados; valorar el trabajo en equipo, aceptar la crítica, vivir en generosidad y sobre todo en alegría.
Que todo lo que hagamos, lo hagamos con la alegría que nace del corazón, la que manifiesta la verdadera presencia del Espíritu del Señor. Para ello, hay que vivir en equilibrio, silencio, agradeci-miento, esperanza y generosidad.
Me quedo con dos frases de la Santa Madre:
“Si me fuera dado vivir de nuevo, me entregaría por entero al Espíritu”.
“Por una sola niña hubiera fundado la Sociedad del Sagrado Corazón”.